Tras la muerte de su abuela Arica, Estefanía, una joven historiadora recién graduada, regresa al pueblo de su infancia, Neblares, un rincón remoto de Gredos marcado por la niebla, la nieve y el silencio. Lo que comienza como una despedida se transforma en un redescubrimiento personal y ancestral: un cuaderno de plantas escrito a mano, símbolos rúnicos grabados en la piel de las mujeres de su familia, y una serie de sueños y visiones que despiertan un legado dormido. A través de documentos antiguos, rituales olvidados y la historia oral de los últimos habitantes del pueblo, Fani se adentra en el linaje de las guardianas: mujeres que, desde el siglo XII, han protegido un conocimiento ancestral vinculado con los orígenes vikingos de la región y con una amenaza que aún acecha desde la sombra: la Caza.