Se llama José Luis Blanco y apenas era un niño fascinado por la voz, la figura y las canciones de Elvis Presley cuando en 1977 el mundo supo que el rey del rock acababa de morir. Desde entonces se propuso emular a su ídolo hasta convertirse, muchos años después, en el mejor Elvis español, como se le reconoció en 2012 cuando tras su participación en un concurso en Benidorm fue invitado a intervenir en el Porthcawl Elvis Festival, un certamen que reúne cada año a miles de fans e imitadores de Elvis Presley y que pasa por ser el mayor y más importante festival dedicado a su figura en toda Europa.